La pasada noche soñé que estaba en un concierto. Sentado en un prado, a mi alrededor un prisma de sonidos y una orquesta de colores. Al viento los árboles, con sus ramas jugando con el aire. A la percusión la lluvia, que caía rítmica e intermitente. Tic tac. Una nota por cada rayo de sol que se filtra entre las nubes, como si tocara las teclas de un piano invisible. De la hierba llegaba un canto susurrado. Una canción de cuna tocada por la madre naturaleza. Pero esta banda no existe sólo en los sueños. Dad la bienvenida a SORE EROS, un proyecto musical de Robert Robinson, establecido en Connecticut y en el pasado colaborador de Ariel Pink. Si ya sois fans de Panda Bear sin duda debéis haceros con una copia de Second Chants, el segundo LP de Sore Eros, publicado en Shdwply Records. Llamémoslo Dreamy pop, o rock o Folk, como prefiráis, siempre que sea dreamy. Experimental y clásico al mismo tiempo. Música compuesta y registrada en la cama pero que trasciende espacio y tiempo. Una entrada a otra dimensión.
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